Los pasos de Coco Chanel en Francia..

En el Día Internacional de la Mujer queremos homenajear a un ejemplo de profesionalismo, lucha y pasión, Coco Chanel...
No hay más que decir el nombre de esta gran creadora francesa que revolucionó el mundo de la alta costura para que todo empiece a oler a glamour, lujo, fama..., aunque su intensa vida también tuvo sus sombras. De Saumur a París, te invitamos a conocer la ruta que descubre a este ícono internacional de la moda...

Saumur
En el valle del Loira, la ciudad que vio nacer a Gabrielle Bonheur Chanel el 19 de agosto de 1883 es famosa hoy por su castillo, su escuela de equitación, sus champiñones y sus vinos espumosos. Sus mansiones de piedra recuerdan la importancia que tuvo en siglos pasados, pero poco tienen que ver con el origen modesto de la gran creadora francesa que vivió en la ciudad junto a sus cuatro hermanos hasta los doce años, tras la muerte de su madre.

Saumur, donde nació Coco Chanel, es famosa hoy por su castillo, su escuela de equitación, sus champiñones y sus vinos espumosos.

Aubazine

En un orfanato de esta ciudad medieval que domina el valle de Corrèzey junto a sus hermanas Julia y Antoinette fue abandonada por su padre, que se marchó a hacer fortuna a América. Pese a tan triste recuerdo, la ciudad, próxima a Limoges, presume hoy de un magnífica abadía cisterciense del siglo XII, en la que todos los meses de agosto tiene lugar una popular fiesta medieval. Una vez en esta agreste región del centro de Francia debes seguir descubrimiento el entorno: Limoges, sinónimo de porcelana; los bellos pueblos de Collonges-la-Rouge, famoso por sus característico color, y Turenne, situado en un promontorio que corona un castillo; Annesse-et-Beaulieu, con su espectacular iglesia, y la pintoresca Argentat; las ruinas de Oradour-sur-Glane, y Arnac-Pompadour, la ciudad del caballo.

Allier
Siguendo a Coco Chanel llegarás hasta la atractiva Moulins, tierra de los duques de Bourbon y capital del Bourbonnais. Fue a los 18 años cuando fijó su residencia en este apartado lugar junto a unas monjas para aprender el meticuloso oficio de costurera. Además de contemplar la catedral gótica de Notre-Dame, un buen puñado de hoteles decimonónicos y visitar el Centro Nacional del Traje de Escena, presidido por Christian Lacroix, no dejes de acercarte al Gran Café, donde aún permanece vivo el recuerdo de la genial diseñadora que en este lugar se convirtió en cantante de cabaret y dejó de llamarse Gabrielle para pasar a ser simplemente Coco Chanel. No lejos queda Vichy, la pequeña ciudad a orillas del río Allier famosa por sus aguas y su Ópera y donde pasaba sus vacaciones junto a su tía.

Apartamento de Coco en París.

Compiègne
Siguiendo a uno de los hombres de su vida, el rico propietario de caballos de carreras Étienne Balsan, llegará hasta el pico más septentrional de Francia. Es una buena excusa para visitar el gran castillo de Compiègne, residencia predilecta de Napoleón III y convertido hoy en museo. Pero también para conocer Chantilly, la capital francesa de las carreras ecuestres, con su lujosa combinación de castillo, parque y bosque; el Châteaux de Pierrefonds o Senlis, con una gran catedral gótica presidiendo sus casco antiguo. Pero también pueblos de piedra y de adobe como Gerberoy y hasta escenarios marítimos, como la bahía de Somme o la playa de Marquenterre.



Calle Cambon
Con el apoyo de Arthur Boy Capel, otro de los amores de su vida, Coco abrirá su primer taller de modista en esta calle parisina, junto a la lujosa plaza Vendôme. En esta mítica dirección todavía se encuentra la célebre casa de costura que lleva su nombre.

Coco en la finca La Pausa, París.

Deauville
Y hasta Normandía, una región de verdes pastos y vacas paciendo, de sidra y quesos, pero también de buenas playas y monumentos históricos hay que desplazarse siguiendo la huella de Coco, porque fue aquí, y concretamente en Deauville donde en 1913 abre una tienda que lleva su nombre completo: Gabrielle Chanel. Hoy este lugar cuenta con la estación balneario más glamourosa de la costa francesa y se ha convertido en lugar predilecto de ricos parisinos que exhiben sin pudor fortunas y lujo. Al sur queda el Monte St.Michel y, al este, el jardín de Monet en Giverny.

Biarritz
Dos años después de Deauville, Coco abre su tercera tienda en esta ciudad costera próxima a la frontera española, y es aquí donde concibe su primera colección efectiva. La que fuera lugar de recreo para los adinerados europeos en el siglo XIX es hoy un tranquilo lugar con buenas playas, el mejor surf de Europa, un interesante museo de la Mar, dos casinos y uno de los grandes hoteles de lujo de Francia, el Palais, antigua residencia de la emperatriz Eugenia.

Grasse

Museo de la Perfumería de Grasse.

Con vistas al mar y rodeada de colinas y campos de flores, Grasse es el centro de la industria del perfume desde el siglo XVI y su nombre está íntimamente unido al perfume de la gran diseñadora, el nº 5 de Chanel, tal vez el más famoso de todos los tiempos..